De acuerdo con el significado de la palabra inglesa patchwork, que traducida al castellano significa labor de retazos, y teniendo en cuenta el proceso de ejecución de esta labor, resulta lógico que este trabajo puramente artesanal se pueda llevar a cabo sin necesidad de utilizar aguja.
Una de las peculiaridades de esta manualidad es que se realiza sobre poliestireno o porexpán, aunque también se puede desarrollar sobre diferentes soportes como cristal, madera, metal, etc, de tal forma que se obtiene como resultado una mezcla de atractivos materiales entre los que figuran telas, estaño, plomo, entre otros, que dan lugar a verdaderas obras de artesanía.
La técnica más habitual para ejecutar el patchwork sin aguja son las incisiones sobre el poliestireno.
Por el contrario, cuando los soportes son más duros y rígidos, el artesano también emplea cola o pegamentos para hacer el collage ó decoupage. Tanto en un caso como en otro, la elaboración de este trabajo es sencilla, amena y da como resultado unas bellas creaciones. Esta manualidad resulta ideal para crear diseños muy elaborados y acabados sin costuras, como los dibujos o los cuadros.
Los materiales empleados para realizar el patchwork sin agujas son diferentes a los que se utilizan en el método tradicional. En este sentido, los principales elementos utilizados para realizar esta manualidad son los retales de tela, el cartón, el soporte de porexpán, la cola vinílica, el spray adhesivo para tela, el cutter, una herramienta con punta y el relleno, este último es opcional, sólo se realiza cuando se quiere dar volumen a algunas zonas concretas del diseño.
Tipo de Telas
En general, las telas preferidas son las de algodón, aunque también se pueden emplear otros tejidos que destacan por su nobleza y atractivo como la seda, el lino y las telas sintéticas.
Proceso de elaboración
El proceso de creación se realiza en los siguientes pasos. El primero consiste en transferir el diseño elegido a la base de porex. Con el cutter el artesano ha de marcar el contorno de la imagen. Se recorta el patrón de cada área del diseño, así como el relleno con la forma de cada patrón. Acto seguido, se corta la tela necesaria para cada zona del diseño, dejando un margen de un par de milímetros en relación al borde del patrón. El siguiente paso se basa en colocar sobre cada área el relleno por encima de la pieza de tela. Mediante la herramienta con punta, se introduce el sobrante de tela en el surco.
Historia
Los arqueólogos han encontrado evidencias de que el patchwork fue utilizado por los antiguos egipcios para elaborar su ropa, y para decorar paredes, cortinas y muebles. Las representaciones más antiguas datan de hace 5500 años (3400 a. C.).
Mientras que el patchwork chino posiblemente comenzó con el emperador Liu Yu de la dinastía Liu Song. Las piezas más antiguas conservadas datan de principios de la Edad Media, época en la que, entre otros usos, se emplearon capas de tela acolchada para construir de armaduras, que mantenían a los soldados cálidos y protegidos. La armadura japonesa se hacía de una manera similar.
Usando esta técnica, las colchas comenzaron a aparecer en los hogares durante los siglos XI al XIII. A medida que el clima europeo se volvió más frío, aumentó el uso de edredones de cama y, por lo tanto, se desarrolló la práctica de embellecer una tela simple mediante la creación de patrones y diseños, junto con el desarrollo de acolchados decorativos. La tradición de hacer edredones fue llevada a América, especialmente a los Estados Unidos, por los inmigrantes europeos.
Fuentes: manualidades.innatia.com; Reme Berasategui; Wikipedia